Victoria del seguro de desempleo
Cuando la pandemia provocó despidos masivos en 2020, cientos de miles de virginianos se encontraron sin trabajo y con dificultades para pagar el alquiler, comprar alimentos, costearse las recetas o hacer frente a los pagos de los préstamos.
¿La lucha que muchos no esperaban? Intentar acceder a los fondos del seguro de desempleo a través de la Comisión de Empleo de Virginia (VEC). En lugar de recibir la ayuda de emergencia que necesitaban, muchos se enfrentaron a largas esperas, prestaciones cortadas sin previo aviso, líneas de teléfono ocupadas y sitios web que no funcionaban correctamente. Décadas de falta de inversión en el sistema de protección social de Virginia habían tenido un resultado previsible: el sistema falló para muchos virginianos cuando más lo necesitaban.
LAJC ha estado abogando por mejoras en el VEC durante años, incluyendo la presentación de una demanda en 2021 junto con el Virginia Poverty Law Center, Legal Aid Works, y los socios pro bono Consumer Litigation Associates y Kelly Guzzo, PLC. Uno de los principales objetivos de esta iniciativa era poner fin a la práctica del VEC de suspender los pagos repentinamente cuando detectaba un posible problema con la solicitud de una persona. No sólo causaba daños devastadores, sino que además era ilegal.
«Mis hijos no tuvieron Navidad. Me embargaron el vehículo el día después de Navidad. Nos quedamos sin casa y ahora vivimos en una caravana prestada… Todo lo que ellos (el VEC) me dicen es que no hay nada que yo o ellos podamos hacer para acelerar el proceso que sólo tengo que esperar.»
– George, una de las muchas personas que compartieron una historia con nosotros
Juntos, nuestros esfuerzos consiguieron que el VEC liberara los pagos «parados» a quienes los necesitaban. Sabíamos que muchos virginianos se verían beneficiados por el cambio, pero recientemente hemos conocido el impacto total de esta defensa:
Hasta la fecha, más de mil millones de dólares en ayudas de emergencia que antes habrían estado retenidas durante meses (o más) han llegado a manos de casi 180.000 virginianos.
Y ésta es sólo una de las mejoras del sistema que nosotros y nuestros socios de todo el estado hemos ayudado a impulsar en la VEC a través de nuestros litigios, la defensa administrativa, la organización comunitaria, la presión mediática y el trabajo con los legisladores.
Aún queda mucho por hacer para que Virginia cuente con un programa de seguro de desempleo que realmente funcione para todos aquellos que lo necesitan. Seguimos abogando por un sistema que funcione para los virginianos en todo momento y no sólo durante una emergencia.